En el mundo de los accesorios, hay tendencias que se vuelven virales, pero desaparecen casi al instante, y otras que perduran hasta convertirse en un verdadero lenguaje de estilo. Entre ellas encontramos el ring stacking o el arte de apilar anillos, que narra una historia sin necesidad de palabras.
Esta forma de expresión combina elegancia, estilo y un profundo conocimiento de la identidad propia, aunque puede ser fácil caer en el exceso. Aprende a encontrar el equilibrio perfecto con los tips de VIDAL & VIDAL.
¿Qué es el ring stacking? Reglas básicas
El ring stacking consiste en llevar varios anillos en un dedo o combinar varias piezas en una misma mano. Este concepto no es una novedad, ya que en las antiguas civilizaciones se utilizaban estas joyas para transmitir poder, estatus o riqueza. Sin embargo, la variante contemporánea de este arte abraza una filosofía de libertad creativa: no se trata de seguir dictados estrictos, sino de componer looks únicos donde cada anillo contribuye a crear un conjunto armonioso.
Por tanto, la clave está en lograr el equilibrio justo entre los volúmenes, las texturas y los metales de tu colección para conseguir el resultado esperado. Las reglas básicas del ring stacking son:
1. Combinar metales. ¿Quién dijo que la plata y el oro están reñidos? Mezcla diferentes acabados para aportar un toque diferente a cada stack. Si tienes dudas, elige un metal dominante y complementa con uno o dos anillos del segundo material.
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2. Aunar estilos. La mejor parte de esta tendencia es que, en la variedad, está el gusto. No dudes en fusionar modelos grandes y finos, básicos y con piedras, lisos y texturizados… Hasta un solitario puede apilarse. El truco está en llevar, por ejemplo, una joya estrecha con una ancha para añadir volumen.
3. Evitar excesos. Aunque lucir varios anillos puede ser una declaración de estilo, pasarse puede provocar el efecto contrario. Te recomendamos dejar libre al menos un dedo de la mano para equilibrar el resultado y evitar que las joyas se rocen.
4. Elegir un favorito. Si no sabes muy bien por dónde empezar, apuesta por un anillo central que conjunte con el resto de tu colección y se convierta en el corazón de tu stack. Así, será el protagonista mientras lo complementas con otros accesorios más sobrios.
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5. Romper las normas. Aunque existen ciertos principios, puedes saltarte las reglas si quieres: el objetivo del ring stacking es expresar tu personalidad y descubrir combinaciones nuevas que hasta ahora no se te habían ocurrido. No hay armonías buenas o malas, solo diferentes puntos de vista.
¿Qué estilo de ring stacking va más contigo?
Ahora que conoces los principios básicos del ring stacking, es momento de centrarnos en algunos de sus estilos más destacados para que descubras cuál se adapta más a ti en función de la ocasión y tu estado de ánimo. ¡Inspírate!
Para el día a día
Los stacks diarios apuestan por la comodidad sin perder de vista la elegancia. No importa si vas a hacer recados o si tienes pensado quedarte en casa: puedes llevar joyas sutiles que te complementen. En la discreción también hay fuerza. Por ejemplo, puedes apilar un anillo de diamantes con uno de oro y otro de tiras.
Para el trabajo
Tanto si tienes una reunión importante como si vas a acudir al afterwork, transmitir tu personalidad a través de tus piezas es posible sin renunciar a la sofisticación. Si quieres una idea atemporal, puedes combinar un anillo con piedras naturales, uno de plata, otro de oro y un cuarto que sea fino.
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Para una ocasión especial
Si vas a celebrar un hito en tu vida laboral o personal, lucir una combinación a la altura es clave para recordar este momento para siempre. Si buscas inspiración, puedes empezar por un modelo statement, acompañarlo de piezas básicas y rematar el look con una joya única, como un solitario.
Para una fiesta
No importa si vas a acudir a una celebración, una cena con amigas o un concierto: la noche es el momento perfecto para apostar por stacks llamativos que, quizás, no te atreverías a lucir de día. Consigue conjuntos hipnóticos con mezclas de materiales de anillos chunky junto a opciones texturizadas, de colores o con varias tiras.
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No olvides cuidar tus anillos
Aunque esta tendencia es una verdadera fuente de inspiración si adoras los accesorios, es importante tener en cuenta que debes cuidar tus anillos a lo largo de todo el año para que te acompañen durante más tiempo. Para ello:
- Retíralos cuando vayas a hacer deporte, limpiar con productos agresivos, estar mucho tiempo en contacto con agua o echarte cremas y perfumes. Vigila también los cambios bruscos de temperatura, que pueden agrietar algunas piedras o dañar los metales.
- Guárdalos con cuidado y por separado: usa un joyero con compartimentos forrados, conserva cada anillo en una bolsita individual y evita la humedad.
- Límpialos de forma suave, pero con frecuencia: en general, puedes utilizar agua tibia, unas gotas de jabón neutro, un cepillo blando y un paño que no suelte residuos.
- Revísalos visualmente: muévelos con cuidado para comprobar si alguna parte se ha soltado, fíjate si algún elemento se ha levantado o torcido y acude a una persona de confianza en caso de duda.
En definitiva, el ring stacking es mucho más que una moda pasajera: es una oportunidad para explorar nuestra creatividad y llevar a diario una selección de las joyas que mejor nos definen. En esta afirmación de estilo, las reglas están para reescribirse y la única voz que importa es la propia.
